El deseo de conocer un nuevo país, el anhelo de reencontrarse con la familia y las ganas de disfrutar de unas vacaciones soñadas se vieron truncados para numerosas personas que denunciaron haber sido víctimas de una estafa por parte de una agencia de viajes en Chile, relacionada con la venta de pasajes. La dueña de esta empresa, Erika Leonarda Medina Rojas, ha estado ausente del país durante años, lo que ha dejado estancadas las causas en el Poder Judicial.
La mujer, de nacionalidad venezolana y que se presenta en sus redes sociales como “profesional del turismo”, fundó las agencias “Erika Travels” y “Voyage Travels”, a través de las cuales supuestamente estafó a decenas de personas que deseaban viajar al extranjero.
Uno de los afectados, David Bohorquez, se comunicó con Denuncias BBCL para relatar su experiencia. David había programado un viaje a Venezuela con la mencionada agencia, llegando a ella por recomendación de otros.
Al principio, todo parecía ir bien. David realizó las transferencias correspondientes y recibió pasajes aéreos de la aerolínea Copa Airlines, junto con los números de reserva, timbres y códigos. Sin embargo, a pocas horas de abordar, Erika lo contactó para informarle que el viaje no se llevaría a cabo debido a un supuesto quiebre de relaciones entre Venezuela y Panamá, lo cual parecía creíble en el contexto internacional.
La mujer le ofreció dejar los pasajes abiertos, lo que sonó demasiado bueno para ser verdad. David decidió verificar la validez de los pasajes con la aerolínea, y la respuesta fue clara: “Hemos realizado una búsqueda con su correo electrónico, con el código de reserva en el documento que nos envía, por nombre, por fecha y número de vuelo y no se ha localizado esta reserva”.
Más afectados por estafa con sus pasajes
David no fue el único afectado. BioBioChile contactó a al menos siete personas más que denunciaron la misma situación: la venta de vuelos falsos y la falta de respuesta por parte de Erika y su empresa.
Otro caso es el de Ronald, quien conoció a Erika a través de una amiga. Le dijeron que era confiable y que ofrecía precios más económicos. En el verano de este año, Ronald y su hija debían viajar a Venezuela para realizar unos trámites, comprando solo pasajes de ida.
Después de realizar sus diligencias, comenzó a buscar vuelos de regreso a Chile, pero no encontró nada. Recordó a Erika y la recomendación que había recibido. “La contacté y le dije lo que necesitaba, pero que el viaje debía ser antes del 16 de febrero para poder viajar a Brasil con mi familia. Me dijo ‘dame un par de días y lo gestiono’”, relató Ronald.
Desembolsó casi mil dólares, ya que desde 2023, Erika reside en Estados Unidos y la transferencia se realizó a una cuenta de Zelle, un servicio de pago digital. Sin embargo, dos días antes del viaje, Erika le informó que no podría viajar, pero que podía reagendar para el 25 de febrero. Ronald esperó, pero nuevamente no pudo viajar, lo que lo llevó a gastar otros mil dólares en nuevos pasajes para regresar a Chile.
“Perdí tiempo, dinero, vacaciones, todo. No pude viajar a Brasil con mi familia, perdí el vuelo”, lamentó Ronald.
Confié en una delincuente
Otro afectado, Ukardo, también vivió una experiencia similar. Necesitaba viajar con urgencia a Colombia por motivos de salud de su madre y compró pasajes con Erika por un monto de $900 mil, pero su viaje fue cancelado en dos ocasiones. Tras exigir el reembolso, Erika le comunicó que tendría que esperar 45 días hábiles, pero hasta la fecha no ha recibido su dinero.
“Ella no está en Chile, pero tiene cuentas chilenas, residencia, cuentas bancarias en Estados Unidos, sigue estafando. Lo que debería pasar es que le bloqueen las cuentas para que no pueda seguir con eso. Yo confié en una delincuente”, expresó Ukardo.
En la misma línea, Anthony planeaba regresar a Venezuela en diciembre de 2024. Una vecina le recomendó a Erika, quien había viajado sin problemas. Anthony gestionó la compra de cuatro pasajes a Maracaibo por un total de 1.962.000 pesos. Recibió supuestos boletos, pero antes de viajar, se le ofreció la opción de reagendar debido a la ruptura de relaciones diplomáticas entre Venezuela y Panamá.
Al igual que los demás, Anthony se encontró con que los vuelos eran falsos y, tras solicitar reembolsos, no ha recibido respuesta ni indemnización.
Situación judicial de Erika Medina
Actualmente, Erika Medina Rojas se encuentra prófuga de la justicia y con orden de captura. Las denuncias de los afectados llevaron a la formalización de una causa en su contra. En abril de 2024, se ingresó una denuncia, pero no se logró localizar a la mujer, quien ya había abandonado Chile.
Fue declarada rebelde, lo que significa que, al existir una orden de detención, no se presenta ante la justicia ni es encontrada por la policía. Recientemente, fue incluida en el Registro Nacional de Prófugos.
La Fiscalía Oriente de la Región Metropolitana, encargada de la investigación, confirmó que “la imputada mantiene orden de detención vigente en su contra por esta investigación y se encuentra prófuga de la justicia”. La causa está actualmente en sobreseimiento temporal, lo que implica que está en pausa hasta que la imputada sea detenida y se pueda formalizar la investigación por delitos de estafa. En esta causa hay cuatro víctimas.
Amenazas y excusas
Los relatos de las víctimas indican que, al principio, Erika se muestra dispuesta a resolver los conflictos, ofreciendo opciones como recalendarizar los vuelos o dejar los boletos abiertos. Sin embargo, siempre termina ocurriendo lo mismo. Cuando los afectados exigen el reembolso, Erika promete plazos que nunca cumplen.
En una conversación de WhatsApp, Erika le respondió a David: “Ya están señalados todos… Cuando viajen Mosca… en los aeropuertos por sicarios”.
David logró contactar formalmente a al menos 11 personas, y el perjuicio económico del grupo asciende a $30 millones.
¿Qué dijo Erika Medina?
BioBioChile intentó comunicarse con Erika Medina Rojas para exponerle las acusaciones en su contra. Aunque hubo interacción formal por correo electrónico, ella no autorizó la reproducción de su comunicado. A pesar de que se le solicitó una respuesta formal, Erika se excusó citando artículos de la constitución chilena y amenazando con acciones legales. Hasta el cierre de esta nota, no se había recibido respuesta por parte de la mujer involucrada.
Si tienes una denuncia que quieras compartir, puedes escribir al correo denuncias@biobiochile.cl o al número de WhatsApp +56 9 9845 7334.