Un informe elaborado para el Departamento de Empleo y Relaciones Laborales de Australia contenía múltiples citas y referencias falsas, atribuibles al uso de inteligencia artificial generativa sin la debida supervisión. Tras la detección de estos errores, Deloitte corrigió el documento y acordó un reembolso parcial de 440 mil dólares australianos, aunque aseguró que las conclusiones principales del informe se mantienen vigentes.
