El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ofreció disculpas a la ciudadanía tras la dimisión de Santos Cerdán, quien era su hombre de confianza en el PSOE (Partido Socialista Obrero Español). Cerdán dejó su cargo como secretario de Organización del partido tras verse implicado en un escándalo de corrupción. En un tono serio, Sánchez declaró: “Quiero pedir disculpas a la ciudadanía, porque el Partido Socialista y yo como secretario general del PSOE no debimos confiar en él”. Además, anunció que llevará a cabo una reestructuración en la dirección del partido.
El presidente del Gobierno indicó que exigió la renuncia de Cerdán después de recibir un informe de la Guardia Civil que lo implicaba en supuestos actos de corrupción. “Aunque la decepción es grande, la respuesta será siempre contundente”, afirmó Sánchez. En una declaración posterior, prometió una respuesta firme contra la corrupción, desafiando a la oposición conservadora y de extrema derecha a presentar una moción de censura en lugar de solicitar que se adelanten las elecciones generales.
Cerdán, además de su renuncia en el partido, también dejó su acta de diputado en el Congreso. Considerado el “número 3” del PSOE, se le acusa de gestionar comisiones ilegales relacionadas con el exministro de Transportes, José Luis Ábalos, y un asistente, en el contexto de la adjudicación de obras públicas, según un informe de la policía judicial.
El escándalo de corrupción que afecta al PSOE ha alterado significativamente el panorama político en España, especialmente tras la divulgación de audios del informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. Según El País, las grabaciones sugieren que Cerdán desempeñó un papel crucial en un esquema que implicaba el reparto de 620 mil euros (aproximadamente 673 millones de pesos chilenos) en comisiones ilegales de una empresa que obtuvo contratos públicos entre 2019 y 2023.
Una de las transcripciones de las grabaciones incluye una conversación entre Cerdán y el exasesor del ministerio de Transporte, Koldo García, sobre la distribución de dinero. El informe de la UCO señala que en este audio, “Koldo manifestó haber recibido 60.000 euros, interesándole Santos (Cerdán) que, de esos 60.000 euros, 50.000 euros correspondían a Ábalos y 10.000 euros al propio Koldo”. Koldo también mencionó que había entregado la totalidad a Ábalos y que aún se le debía dinero, afirmando que la deuda pendiente con Ábalos ascendía a 150.000 euros.
La transcripción de la conversación del 22 de abril de 2019 es la siguiente:
-Koldo García: “Necesito algo de dinero, jefe, porque se lo di todo a él”
-Santos Cerdán: “¿Cuánto le dimos?”
-Koldo García: “60”
-Santos Cerdán: “¿60 le dieron ahora?”
-Koldo García: “Sí, pero yo…”
-Santos Cerdán: “Tienen que quedar allí, de allí eran 50 y 10 para ti”.
En otro diálogo, fechado el 2 de febrero de 2022, Koldo solicita a Cerdán que le consiga dinero para Ábalos, mencionando que desea quedarse con una parte. También se hace referencia a una persona llamada Paco, cuya identidad no ha sido confirmada hasta el momento.
El 23 de noviembre de 2023, se registró un audio en el que se revela que Ábalos tendría pendiente de cobro una suma de 450.000 euros, mientras que Koldo reclamaría 130.000 euros, además de otros 100.000 euros adicionales. En esta conversación, Koldo le pregunta a Ábalos sobre rumores de su posible inclusión en las listas para las elecciones europeas del año siguiente:
-Koldo García: “Y te vas a Europa, ¿no? (en referencia a los comicios de junio de 2024)”
-Ábalos: “Yo qué sé, Koldo. Yo solo sé que no tengo un puto duro. Pero, pero, no sé, que voy con 50 euros toda la puta semana, eso sí, los estoy estirando que te cagas”
-Koldo García: “Pues tu hijo tiene que tener dinero tuyo… por cojones”.
Ábalos es sospechoso de haber cometido delitos de integración en organización criminal, tráfico de influencias, cohecho y malversación, por recibir dinero a cambio de contratos adjudicados durante la pandemia de COVID-19. Tras el estallido del escándalo en 2024, la ejecutiva federal del PSOE solicitó su dimisión como diputado en las Cortes Generales, pero Ábalos se negó a renunciar a su escaño, lo que resultó en su expulsión del partido.
El denominado Caso Koldo ha provocado una fuerte reacción en la oposición, aunque las respuestas han sido variadas. Borja Sémper, portavoz del Partido Popular (PP), exigió una comparecencia parlamentaria inmediata de Sánchez, argumentando que una moción de censura sería un “balón de oxígeno” para el presidente del Gobierno. Sémper señaló que los socios parlamentarios de izquierda y los nacionalistas e independentistas vascos y catalanes no permitirían que Sánchez fuera destituido.
Por su parte, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, acusó a Sánchez de tener conocimiento de la situación y de mirar “para otro lado”, según reporta RTVE. Feijóo exigió que “que confiesen, que paguen, y que dimitan”, afirmando que “España no puede ser rehén de la delincuencia del Gobierno. Hay que cerrar el capítulo de la indecencia”.
En contraste, Santiago Abascal, líder de VOX, ofreció los votos de su partido para una moción de censura con el objetivo de ganarla y convocar elecciones de inmediato. La situación actual indica que el escándalo ha debilitado la posición del PSOE y, en particular, la de Sánchez. La falta de consenso en la oposición ha impedido, por el momento, que se lleve a cabo una moción de censura efectiva. Este caso ha puesto en riesgo la estabilidad del gobierno español, evidenciando serios problemas de corrupción en la cúpula del PSOE y generando una crisis política significativa en España.