Corea del Sur ha recibido la aprobación oficial para establecer contacto con las autoridades de Corea del Norte con el objetivo de organizar un maratón internacional que permitiría a los corredores cruzar la Zona Desmilitarizada (DMZ), en un esfuerzo por recuperar los intercambios intercoreanos. El Ministerio de Unificación de Corea del Sur ha dado luz verde para que la ciudad surcoreana de Paju, ubicada en la frontera con Corea del Norte, inicie las gestiones necesarias, según lo informado este sábado por un funcionario municipal citado por la agencia de noticias local Yonhap.
El recorrido del maratón está diseñado para comenzar en el Parque de la Paz Imjingak, en el lado sur, y después cruzar un puente hacia la zona desmilitarizada, para posteriormente pasar por la ciudad fronteriza norcoreana de Kaesong y regresar al punto de inicio. Un funcionario del gobierno surcoreano declaró: “Queremos celebrar el éxito del ‘Maratón Internacional Paju-Kaesong DMZ’ para crear un escenario simbólico que conecte la península coreana con el mundo en paz”.
El evento tiene como objetivo reunir a 20,000 corredores de al menos diez países, convirtiéndose en un símbolo de cooperación transfronteriza, según el gobierno de Paju. Sin embargo, la legislación surcoreana restringe cualquier actividad de este tipo sin el permiso previo del gobierno. Las autoridades municipales de Paju esperan reunirse con representantes norcoreanos a principios de 2026 para presentar el proyecto y fijar un calendario para el evento, aunque actualmente se desconoce si Pyongyang responderá a esta propuesta.
Desde su investidura en junio, la administración del presidente Lee Jae-myung ha tomado medidas para distender las relaciones, como el desmantelamiento de altavoces y la suspensión de emisiones propagandísticas hacia el norte; sin embargo, el régimen norcoreano ha continuado rechazando las propuestas de diálogo. En un contexto más amplio, el régimen ha arremetido contra quienes lo han llamado “hipócritas” y “presas de la paranoia de desnuclearización”, tras un discurso ofrecido por el presidente de Estados Unidos que defendió un enfoque en tres fases para lograr el desarme nuclear en la península.
La respuesta del régimen norcoreano fue difundida a través de un editorial de la agencia de noticias KCNA, que desestimó de manera contundente la iniciativa del mandatario surcoreano. En este contexto, el presidente Lee Jae-myung se refirió a la ‘teoría de etapas’ de desnuclearización como un “poco sueño ingenuo”, comparando el intento de lograrlo con “tratar de atrapar una nube que flota en el cielo”. Esta declaración fue realizada durante una intervención en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS) en Washington, donde también reiteró su estrategia de pasos para establecer un proceso gradual y verificable de eliminación de armas nucleares.
El régimen norcoreano calificó la idea de un desarme como “extinta” en el contexto político actual del país. No obstante, se admitió que un cambio solo sería posible bajo condiciones externas radicalmente distintas. El texto no incluyó críticas ni referencias a una cumbre bilateral entre Washington y Pyongyang, y tampoco fue mencionado en el diario Rodong Sinmun, que es el principal medio de consumo interno en Corea del Norte, lo que sugiere que el mensaje estaba orientado principalmente hacia el exterior. (Con información de EFE)