El Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció este lunes que ocho barcos militares de Estados Unidos y 1.200 misiles están apuntando hacia su país, en respuesta al despliegue antinarcóticos que Washington ha anunciado en aguas del Caribe. Estados Unidos ha informado sobre el envío de buques de guerra y aproximadamente 4.000 efectivos hacia el Caribe sur, en las cercanías de las aguas territoriales de Venezuela, para llevar a cabo maniobras contra el narcotráfico.
Durante un encuentro con la prensa en Caracas, Maduro afirmó que “Venezuela está enfrentando la más grande amenaza que se haya visto en nuestro continente en los últimos 100 años”. Según el mandatario, los “ocho barcos militares con 1.200 misiles y un submarino” que están dirigidos hacia Venezuela representan “una amenaza extravagante, injustificable, inmoral y absolutamente criminal, sangrienta”.
Maduro añadió que “ellos han querido avanzar hacia lo que llaman la máxima presión, en este caso es militar, y ante la máxima presión militar, nosotros hemos declarado la máxima preparación para la defensa de Venezuela“. En este contexto, convocó al alistamiento de venezolanos en la reserva, así como la activación de 4,2 millones de integrantes de la Milicia Nacional Bolivariana, un cuerpo que está compuesto por civiles y que, según analistas, es considerado como un cuerpo politizado. De acuerdo con el presidente, el total de alistados milicianos y reservistas asciende a “8,2 millones” de venezolanos.
Este lunes, Maduro también aseguró que “Venezuela jamás va a ceder frente a chantajes, ni amenazas de ningún signo (…) Si Venezuela fuera agredida, pasaría inmediatamente al período de lucha armada en defensa del territorio nacional y de la historia y del pueblo de Venezuela“.
En cuanto a la relación entre Venezuela y Estados Unidos, cabe destacar que no han mantenido relaciones diplomáticas desde 2019, aunque han establecido canales de comunicación a través de enviados especiales. Maduro mencionó que existían dos canales de diálogo con el gobierno de Trump, pero que “los canales en estos momentos están maltrechos”.
El presidente venezolano criticó la diplomacia estadounidense, afirmando que “la diplomacia de las cañoneras es una diplomacia errática, equivocada, que le han impuesto al Presidente Donald Trump“. Además, advirtió a Trump sobre el secretario de Estado, Marco Rubio, quien es un crítico acérrimo de su gobierno, diciendo que “quiere manchar sus manos de sangre, con sangre sudamericana, caribeña, con sangre venezolana”.
Maduro concluyó afirmando que “ellos están buscando un cambio de régimen a través de la amenaza militar y manchar las manos de Donald Trump de sangre y manchar el apellido Trump de sangre para siempre. Esa es la verdad”.